Ahí le ha dado... No deja de sorprenderme nunca, la fuerza del silencio, más potente aún que algunas palabras. De hecho, me han dicho varias veces "haces más daño por lo que callas, que por lo que dices".
Parezca que tengamos alguna interconexión cibernaútica o algo así... ¡Ya te diré en pocos días por qué!.
Lo primero es la impresionante fotografía que me recuerdad mucho la obra de Dalí.
Ahora, mi reflexión al respecto: "Vivir en el mundo del silencio" es algo con lo que he tomado contacto hace un período corto de tiempo y me ha hecho pensar mucho en este tema. Imaginaos no oir. Ni a tus hijos, ni a tu madre, incluso, ni a tu perro, ni radio ni televisión, ni música cuando conduces... "Silencio absoluto y siempre".
Neuri, como siempre, un poema visual para los sentidos. Un beso muy fuerte.
Bueno Towanda, alguna interconexión internautica o que a mi me va el tema silente. La foto es mogollón surrealista como algunos cuadros de Dali (con los que también ando en estos días, ya te contaré también más adelante).
La fotografía es para simbolizar las "verdades como puños". Y sobre la sordera que me vas a contar, amiga mia.
Hace unos años me quitaron un tumor cerebral y para llegar a él, tuvieron que hacerlo a través del oido. Lo vaciaron, cortaron varios nervios craneales como el auditivo, el estato-vestibular y quedaron seriamente dañado el facial. No sabes el caos y el estres que supone para el cerebro escuchar por un solo lado, con deficiencia y un millón de ruidos y chirridos varios que quedarón desde entonces en mi cabeza. Nunca más he sabido lo que es el silencio, ni tampoco el sonido normal. Nunca más he podido conducir, mi pasión; nunca más he podido leer un libro, solo puedo usar el ordenador y con aumento de lupa. Hay semanas y semanas que ni siquiera puedo salir a la calle por esos ruidos y el vertigo que me producen.
Pero esto que os cuento no es una queja, solo una reflexión de que soy feliz, soy una superviviente, bastante autosuficiente en mi estado...y las personas que tienen salud que la disfruten, y no se acuerden de ella cuando la pierden. Y las personas que tienen algún problema como el mio, pues que se puede vivir, se puede pensar, se puede imaginar y se puede ser feliz, porque tu felicidad esta dentro de ti no en cosas externas.
Jo, Towanda, me he enrollao tanto que esto parece un post en vez de un comentario. Bueno un besito navideño.
Si hay silencios que ensordecen también hay silencios absolutamente enriquecedores, son esos silencios en los que te aislas para poder reflexionar y poder profundizar en ese "pozo" tan profundo cómo es nuestro propio ego....la verdad que el silencio es beneficioso cuando lo buscamos y es dañino cuando nos obligan a vivirlo o cuando no queremos escuchar lo que nos dice porque el silencio también nos habla y no dice en ocasiones aquello que no queremos oir y pienso que es en estos casos cuando es ensordecedor.Me ha impresionado lo que le has contado a Towanda y admiro tu optimismo y ganas de vivir.SALUDOS NAVIDEÑOS
HOLA SUPERVIVIENTE. Se me había ocurrido un haiku de respuesta, pero tras leer lo que has escrito sobre tu actual situación puede parecer algo raro. Que conste que va por otro lado del que se podría tomar. "Solo pueden mantener silencio perfecto quienes escucharon antes todas sus melodías internas." Un muy fuerte abrazo.
Gracias Charo, tu comentario me ha traido a la cabeza un bonito relato sobre esos pozos interiores que hay que vaciar para volver a renacer de nosotros mismos, como niños limpios y puros que vuelven a vivir. Un beso muy fuerte y también mis saludos navideños para ti.
En efecto Manuel, aunque hay muchas clases de silencio ese de que tu hablas es como un arma arrojadiza. La indiferencia llevada al extremo de tan siquiera hablar, mirar, escuchar, ni tener en consideración al otro. Es un silencio tremendamente duro y demoledor para quien lo recibe. Un cordial abrazo.
Vaya emejota, bonito hayku...lo que pasa es que aún me quedan algunas melodias por oir. Pero también se puede escucharlas con el corazón. Un fuerte abrazo y besos para ti y tus chiquitines.
Ahí le ha dado... No deja de sorprenderme nunca, la fuerza del silencio, más potente aún que algunas palabras. De hecho, me han dicho varias veces "haces más daño por lo que callas, que por lo que dices".
ResponderEliminarUn saludo.
Muy cierto, es como la inversa del dicho del árbol q cae y nadie lo escucha :)
ResponderEliminarSaludos
Y bien cierto que es....no hay palabra más expresiva que el silencio.
ResponderEliminarYa sabes que me gustan los haykus, pero spy incapaz de hacer uno.
Un beso
Parezca que tengamos alguna interconexión cibernaútica o algo así... ¡Ya te diré en pocos días por qué!.
ResponderEliminarLo primero es la impresionante fotografía que me recuerdad mucho la obra de Dalí.
Ahora, mi reflexión al respecto:
"Vivir en el mundo del silencio" es algo con lo que he tomado contacto hace un período corto de tiempo y me ha hecho pensar mucho en este tema. Imaginaos no oir. Ni a tus hijos, ni a tu madre, incluso, ni a tu perro, ni radio ni televisión, ni música cuando conduces... "Silencio absoluto y siempre".
Neuri, como siempre, un poema visual para los sentidos.
Un beso muy fuerte.
En efecto Lord, el silencio a veces hace más daño que muchas palabras.
ResponderEliminarSaludos.
Y lo peor Carlobito es que hay quien se cuestiona la existencia de ese arbol por si mismo, salvo cuando alguien escucha la caida. Que cosas!!
ResponderEliminarSaludos.
Cierto Princesa115 no hay palabra mas expresiva ni dañina a veces, que el propio silencio.
ResponderEliminarBesos.
Bueno Towanda, alguna interconexión internautica o que a mi me va el tema silente. La foto es mogollón surrealista como algunos cuadros de Dali (con los que también ando en estos días, ya te contaré también más adelante).
ResponderEliminarLa fotografía es para simbolizar las "verdades como puños". Y sobre la sordera que me vas a contar, amiga mia.
Hace unos años me quitaron un tumor cerebral y para llegar a él, tuvieron que hacerlo a través del oido. Lo vaciaron, cortaron varios nervios craneales como el auditivo, el estato-vestibular y quedaron seriamente dañado el facial. No sabes el caos y el estres que supone para el cerebro escuchar por un solo lado, con deficiencia y un millón de ruidos y chirridos varios que quedarón desde entonces en mi cabeza. Nunca más he sabido lo que es el silencio, ni tampoco el sonido normal. Nunca más he podido conducir, mi pasión; nunca más he podido leer un libro, solo puedo usar el ordenador y con aumento de lupa. Hay semanas y semanas que ni siquiera puedo salir a la calle por esos ruidos y el vertigo que me producen.
Pero esto que os cuento no es una queja, solo una reflexión de que soy feliz, soy una superviviente, bastante autosuficiente en mi estado...y las personas que tienen salud que la disfruten, y no se acuerden de ella cuando la pierden. Y las personas que tienen algún problema como el mio, pues que se puede vivir, se puede pensar, se puede imaginar y se puede ser feliz, porque tu felicidad esta dentro de ti no en cosas externas.
Jo, Towanda, me he enrollao tanto que esto parece un post en vez de un comentario. Bueno un besito navideño.
El silencio dice mucho, a veces mas que el sonido.
ResponderEliminarUn beso
Y tan duras.
ResponderEliminarBesos.
Si hay silencios que ensordecen también hay silencios absolutamente enriquecedores, son esos silencios en los que te aislas para poder reflexionar y poder profundizar en ese "pozo" tan profundo cómo es nuestro propio ego....la verdad que el silencio es beneficioso cuando lo buscamos y es dañino cuando nos obligan a vivirlo o cuando no queremos escuchar lo que nos dice porque el silencio también nos habla y no dice en ocasiones aquello que no queremos oir y pienso que es en estos casos cuando es ensordecedor.Me ha impresionado lo que le has contado a Towanda y admiro tu optimismo y ganas de vivir.SALUDOS NAVIDEÑOS
ResponderEliminarEn algunos casos el silencio es como la indiferencia..... Ensordecedor y desquiciante.
ResponderEliminarLeí su post sobre el pintor de las aceras. No pude comentar...Blogger a veces me tiene manía
Saludos Neuriwoman
HOLA SUPERVIVIENTE. Se me había ocurrido un haiku de respuesta, pero tras leer lo que has escrito sobre tu actual situación puede parecer algo raro. Que conste que va por otro lado del que se podría tomar. "Solo pueden mantener silencio perfecto quienes escucharon antes todas sus melodías internas." Un muy fuerte abrazo.
ResponderEliminarSi, Guadalupe, el silencio dice mucho lo que pasa que a veces demasiado bajito. Y otras es preferible para el alma. Un beso.
ResponderEliminarHola Toro, sin comentarios. Saludos cordiales.
ResponderEliminarGracias Charo, tu comentario me ha traido a la cabeza un bonito relato sobre esos pozos interiores que hay que vaciar para volver a renacer de nosotros mismos, como niños limpios y puros que vuelven a vivir.
ResponderEliminarUn beso muy fuerte y también mis saludos navideños para ti.
En efecto Manuel, aunque hay muchas clases de silencio ese de que tu hablas es como un arma arrojadiza. La indiferencia llevada al extremo de tan siquiera hablar, mirar, escuchar, ni tener en consideración al otro.
ResponderEliminarEs un silencio tremendamente duro y demoledor para quien lo recibe.
Un cordial abrazo.
Vaya emejota, bonito hayku...lo que pasa es que aún me quedan algunas melodias por oir. Pero también se puede escucharlas con el corazón. Un fuerte abrazo y besos para ti y tus chiquitines.
ResponderEliminarCon permiso...
ResponderEliminarY que silencian tanto como los gritos.
Un abrazo y excelente haiku
Hola Bicefalepena, estas en tu casa. Saludos.
ResponderEliminarUn mar inmenso / de áridos confines / es el silencio (haiku propio)
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