Último parte médico: Fisura costal y tres semanitas de reposo.
Erase una vez un bloguera llamada Neuriwoman a la que le dio un ataque de tos y tanto y tanto tosio que las costillas se fisuro. Así fue y así os lo cuento, la semana pasada me dio un ataque de tos. Ya había ido a mi médico de familia y este había quedado maravillado del tono espasmodico de mis toses que le recordaban casi a una Bordetella parapertussis ( una prima hermana de la tos ferina en otros lares). Se ve que también soy una negada para el arte de toser, o quizas debio ser por olvido. Tras el prolongado lapsus de estar cuatro años seguidos sin coger gripes ni resfriados. Pero tenía mis razones y es que desde que me quitaron lo que ya sabeís de mi cabecita loca, me prometi no toser más. Mi asustadizo cerebro debio pensar que en una tos se me iba a salir mi liquido cefalorraquideo por la cicatriz y opto por no volver a toser, por si las moscas. Pero claro este año ya tocaba y debute con esa tos perruna, ron...